La protección social que el Estado otorga al constitucionalmente reconocido «derecho al trabajo» ha de venir respaldada por empresarios competentes a los que, como propietarios de los medios de producción y organizadores del trabajo, se les impone un alto nivel de diligencia en el cumplimiento de sus obligaciones. Dado que las relaciones laborales se canalizan a través de un derecho tuitivo y protector del trabajador, cuya finalidad es que las mismas se desenvuelvan en un clima de respeto de los derechos y obligaciones de cada una de las partes, hemos de ser conscientes de la importancia de conocer la normativa aplicable —con las diversas opciones que esta otorga— y cumplir con la misma.

Los profesionales que integran el departamento laboral, de cara a llevar a cabo un asesoramiento y defensa de calidad, tanto en vía extrajudicial como en sede judicial, son especialistas y perfectos conocedores de los distintos componentes que integran el derecho laboral, así como de su normativa, jurisprudencia y criterios doctrinales. Entre ellos:

  • Derechos y deberes laborales de los trabajadores.
  • Relaciones laborales de carácter especial.
  • Modalidades de contratos de trabajo.
  • Seguridad y salud en el trabajo.
  • Actuaciones ante el Fondo de Garantía Salarial.
  • Modificación, suspensión y extinción del contrato de trabajo.
  • Descuelgue de convenio.
  • Despidos.
  • Conciliación laboral.
  • Sucesión de empresas.
  • Derechos de representación colectiva y de reunión de los trabajadores de la empresa.
  • Negociaciones y convenios colectivos.
  • Prestaciones de la Seguridad Social.
  • Subvenciones y bonificaciones.
  • Impugnación de actos administrativos en materia laboral y de Seguridad Social.
  • Delitos contra la Seguridad Social.