En Detalle…
Nuestra legislación mercantil impone a todos los empresarios la obligación de llevar una contabilidad ordenada y adecuada a la actividad de la empresa; debiéndose confeccionar necesariamente un libro de inventarios y cuentas anuales y otro diario. Tras el proceso de armonización internacional del marco de información financiera en el que nos hemos visto envueltos —por el que se establecen unos estándares comunes— la llevanza de la contabilidad de forma rigurosa se torna una máxima infranqueable de los sistemas económicos.
De la misma importancia predica la actividad de la auditoría de cuentas anuales que llevada a cabo por un profesional independiente, objetivo, y con valores de ética y escepticismo, otorga fiabilidad a la información económico-financiera de la empresa, frente a los propios accionistas, a los terceros que se relacionan con la misma, y a la sociedad en general.
Los profesionales que integran el departamento de auditorías y contabilidad, de cara a llevar a cabo un asesoramiento de calidad, son especialistas y perfectos conocedores de los distintos componentes que integran el derecho contable y la actividad de auditoría de cuentas, así como de su normativa, jurisprudencia y criterios doctrinales.
Resumen de puntos…
- Confección de los libros contables obligatorios y voluntarios.
- Confección de cuentas anuales.
- Auditoría de cuentas anuales, así como de otros estados financieros y documentos contables.
- Certificación del auditor de cuentas en las ampliaciones de capital por compensación de créditos de las sociedades anónimas.
- Verificación por parte del auditor de cuentas del balance que ha de servir al aumento de capital con cargo a reservas.
- Verificación por parte del auditor de cuentas del balance que ha de servir de base a la reducción de capital por pérdidas.
- Pruebas periciales contables y de valoración de empresas.
- Planes de viabilidad y de restructuración.